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Matemáticas de pizarra

sábado, 30 de julio de 2022

Las perseidas y el resto de lluvias de estrellas fugaces (las olvidadas)

(En esta entrada, muy asequible para el aficionado simple, abordo el concepto de estrella fugaz y de lluvia de estrellas fugaces, en realidad lluvias de meteoros, cómo observarlas y una tabla con las fechas más importantes)   

    Me gustan las Perseidas. Me gusta todo lo que tiene que ver con la astronomía, pero es tan injusto que parezca que sólo hay una lluvia de estrellas fugaces, las Perseidas, cuando hay muchas más... y por cierto las Perseidas no son las más espectaculares. Supongo que a su popularidad ayuda que se producen en verano, a mediados de agosto cuando la gente está de vacaciones y en días en los que los medios de comunicación carecen de noticias. Pero por ejemplo las Delta Acuáridas tienen su máximo el 30 de julio, también en verano y parece que no existen, ni las Leónidas, Gemínidas, Cuadrántidas, Úrsidas, Taúridas... solo las Perseidas.  

    A hablar de las lluvias de estrellas fugaces, y sus fechas e intentar poner un poco de justicia se dedica esta entrada, que ya puestos a reivindicar, la publico en el máximo de las Delta Acuáridas. 

Una Perseida de 2021. Arriba a la derecha... Perseus, de donde parece salir

    Vuelvo a empezar la entrada. Hace mucho, mucho tiempo, en una galaxia muy lejana... yo tenía 15 años y por motivos laborales familiares el último año me había cambiado de población, dejaba Barbate por Cádiz, dejaba un pueblo por la capital. Tenía tienda de campaña nueva y al acabar el curso escolar en junio quise hacer una acampada con los amigos de la infancia a una de las maravillosas playas de Barbate, donde nos habíamos criado, pero mis amigos me dijeron que ya habían hecho una acampada recientemente antes de mi regreso (muchas gracias por no avisar) y que no estaban muy interesados, ahora bien, si la organizaba yo igual se apuntaban. Dicho y hecho (bueno era yo con 15 años como para no hacer algo que me apetecía), dejé de mover el tema, no les dije nada ni a ellos ni a mi familia y me fui solo con mis 15 años recién cumplidos más feliz que una lombriz (también eran otros tiempos) a las afueras de Barbate. No necesitaba a nadie que me pusiera trabas. Si hubiese esperado que se apuntasen posiblemente no se hubiera hecho la acampada ni el comienzo de esta entrada tampoco. Y si hubieran venido no hubiera estado tan atento del cielo como lo estuve. Fue la mejor decisión que pude tomar.

    La verdad es que fue un espectáculo. Me vuelvo a ver tumbado sobre las dulces arenas blancas de las playas de Cádiz, dentro del Parque Natural de la Breña y acantilados de Barbate, en la maravillosa playa de la Yerbabuena. Apenas había luna, por lo que había muchísimas estrellas y no pude haber tenido más suerte con la noche elegida. Hacía un viento notable de levante y por ello nada de humedad.  No había ninguna otra tienda de campaña cerca de mí, solo estaban las luces del puerto de Barbate al este, África al sur, una infinidad de pinos al norte y al oeste, además de las estrellas, el viento y una noche que te forja el carácter. Y lo mejor de todo... era mirar al cielo dirección al mar y ver una estrella fugaz tras otra. Esa noche calculo que vi entre 250 y 300 meteoros (sí, entre 250 y 300, pedí deseos hasta para mis curiosos amigos), casi todos ellos queriendo escapar del mismo sitio, un punto a media altura mirando al sureste algo al sur de la gran M de Acquarius. Era evidente que eso no era normal y días más tarde, buscando información en una enciclopedia de papel (entonces no había  PCS ni internet) descubrí que cada 29-30 de julio se producía el máximo de una lluvia de estrellas fugaces llamadas Delta Acuáridas, que para mí, desde esa noche, fueron especiales. Efectivamente, no pude haber tenido mejor suerte con la noche elegida.

    Esa misma tarde también descubrí que había muchas más lluvias de estrellas fugaces, y mucho más tarde, hoy, quiero compartir con usted lo poquito que sé, comenzando por un precioso recuerdo de la maravillosa etapa en la que uno posee 15 años y tiene toda la vida por delante.

    Efectivamente, estrellas fugaces (meteoros) hay casi todas las noches, y lluvias de estrellas fugaces casi todo el año. Es una pena que sólo se hable de las Perseidas por los motivos que comentaba de producirse a mediados de agosto cuando la peña está de vacaciones y los informativos carecen de noticias. Pero aquí estoy para intentar hacer justicia con el resto de lluvias de estrellas fugaces, las parias, las olvidadas.

1 - ¿Qué es una estrella fugaz?

    A pesar del nombre, las estrellas fugaces tienen bien poco que ver con las estrellas. Su nombre lo reciben porque son como puntos brillantes que se mueven con rapidez en el cielo y podrían parecerse a estrellas en movimiento pero... ¿de verdad que nunca ha visto una y tengo que explicar algo tan precioso?

    El origen de las estrellas fugaces está en los cometas. Los cometas son cuerpos celestes compuestos por roca, metales e hielo, que al acercarse al sol de manera ocasional o periódica, el calor de nuestra estrella (aunque en el espacio haya casi el vacío y una temperatura muy baja, el sol emite radiaciones y calienta los cuerpos... ¿Qué sería de la Tierra y la vida en ella si no fuera así y esas radiaciones fundamentales para nosotros no supieran sortear ciento los cincuenta millones de kilómetros que nos separan del astro rey?) calienta también la superficie del cometa, y el hielo se sublima, arrastrando al espacio partículas de polvo, minerales...

    Esto es, a medida que el cometa se acerca a su perihelio se va activando y va soltando una nube de restos por el espacio. Cuando uno de estos minúsculos restos es barrido por la Tierra, se quema en altas capas de la atmósfera, llamándose meteoros. Si algún resto de cierto tamaño quedara por quemar y alcanzase la superficie terrestre entonces se llamaría meteorito. Es cierto que estas partículas, los meteoros, en general son muy pequeños y se queman por completo antes de caer (siempre acaba cayendo a la Tierra la ceniza de la combustión), pero caen con tal velocidad (la Tierra y los restos tienen velocidad propia), se queman a una temperatura tan alta, y lo hacen en un lugar con tan poco atmósfera que estas piras funerarias son espectaculares y suelen dejar estela. Creo que se quemaban normalmente entre 50 y 250 kilómetros de altura, pero aquí no me haga mucho caso (salvo las tablas al final, he querido que esta entrada se base en mis conocimientos, en mis recuerdos).

     Cuando los trozos son mayores de lo normal, el espectáculo al quemarse es aún más espectacular, y entonces se les llama bólidos o bolas de fuego. Para mí los bólidos son, como dice su nombre, estrellas fugaces muy intensas que cruzan el cielo a mucha velocidad, incluso que se fragmentan en trozos más pequeños mientras caen, mientras las bolas de fuego son más constantes de brillo y lo cruzan de manera más pausada.

    Yo recuerdo haber visto bólidos que tuvieron que reventar sobre mi vertical porque los he escuchado sisear mientras pasaban (teniendo en cuenta la velocidad del sonido, no debieron pasar tan lejos) e incluso me parece recordar un fuerte olor metálico al poco tiempo de pasar (?).

   Este es el origen de las estrellas fugaces. Pequeños trozos de polvo y minerales que se queman en la atmósfera de manera muy brillante para el deleite de aquellos que sabemos que hay algo maravilloso sobre nuestras cabezas o para aquellos que necesitan pedir deseos.

2 - ¿Qué es una lluvia de estrellas fugaces?

    Observemos la siguiente imagen, hecha con todo el cariño. Tenemos un cometa, supongamos periódico, que da vueltas al sol siguiendo una órbita elíptica. A medida que el cometa se acerca al Sol y se va alejando de su afelio o punto más alejado de nuestra estrella, y por contra se va acercando a su perihelio donde cada vez va recibiendo más radiación solar, el cometa va soltando (se subliman) partículas de polvo y minerales. Por ejemplo, el cometa Halley va a llegar a su afelio muy pronto, en diciembre de 2023, por lo que ahora está a una distancia del sol similar a la de Plutón y su actividad es prácticamente nula porque el sol allí apenas calienta. Pero a medida que pase el afelio y que se vaya acercando al sol comenzará a despertar, y se le verán una o dos colas (una de partículas, y puede que una segunda de iones) de materiales que va dejando atrás. Como la órbita del cometa siempre es la misma, en su trayectoria cerca de su perihelio nos vamos a encontrar muchísimas partículas que en su día pertenecieron al cometa, en general muy pequeñas, pero puede haberlas grandes. Imagine que un tipo de geyser de gas de repente aparece en el cometa y además de polvo lanzase rocas mayores al espacio. Los restos del cometa en general serán pequeños, pero no necesariamente.



    Tengamos ahora la Tierra (por suerte nuestro perihelio no está tan cerca del sol como en la imagen o nos achicharraríamos a base de bien una vez al año). Puede que su órbita pase cerca de la órbita del cometa una sola vez al año (a diferencia del dibujo no tienen por que ser dos veces al año porque la órbita de la Tierra y del cometa seguramente transcurran en planos distintos). Como la órbita de la Tierra también se da siempre por el mismo sitio, por las mismas fechas va a pasar cerca de estos restos del cometa, posición A, por lo que por las mismas fechas del año la Tierra va a pasar por zonas que están llenas de estas partículas de polvo y minerales, siendo más probable que haya una, y otra, y otra estrella fugaz, y entonces hablamos de lluvias de estrellas fugaces.
      
    Por ejemplo, las Delta Acuáridas de las que yo hablaba parece ser que pueden deberse al cometa 96P Machholz, un cometa periódico que cada 5 años se pasa a ver al sol recibiendo su calor y dejando parte de él en agradecimiento. Al acercarse la Tierra a la órbita de este cometa, alcanzando la mínima distancia entre órbitas ese  30 de julio, la actividad de estrellas fugaces va aumentando desde mediados de julio a mediados de agosto, alcanzando el máximo esa noche y disminuyendo después.
 
    Sí, las lluvias de estrellas fugaces tienen máximo normalmente en una noche. Ello significa que esa noche podríamos ver en una hora muchos meteoros, pero las noches anteriores y posteriores también vamos a ver estrellas fugaces de esa lluvia porque la Tierra sigue estando cerca de la órbita del cometa, aunque a medida que nos vayamos alejando de esa noche de máximo iremos viendo menos. Las Delta Acuáridas pueden verse desde el 12 de julio hasta al 23 de agosto. Veremos pocas ese 12 de julio y ese 23 de agosto, veremos más más el 17 de julio y el 15 de agosto, aún más el 22 de julio y el 8 de agosto... y el máximo la noche del 30 de julio porque es el momento en el que la Tierra pasa más cerca de la órbita de ese cometa.
    De todos modos esto también son estadísticas que pueden romperse. Las partículas no están uniformemente distribuidas, e igual hay una nube concentrada de partículas que son cruzadas por la Tierra el 28 de julio y da la casualidad de que el 28 se ven más estrellas que en la fecha del máximo, pero normalmente no es así.
  Tengamos también en cuenta que las partículas de polvo que generan los meteoros no están en el mismo sitio, pueden dejarse influir por tirones gravitatorios de otros planetas, algún asteroide que pase por la zona... por lo que insisto que la noche de máximo y la cuantía THZ de la que aún no he hablado son estadísticas.

    Para acabar el apartado, la Tierra es una inmensa escoba celeste, se estima que al año recoge partículas de polvo con un peso equivalente a 16000 kilos (unos 50 kilos al día)

3 - Cómo observarlas

    Para observar estrellas fugaces no hace falta demasiado; buscar un sitio con horizonte relativamente despejado y donde vea el cielo sobre su cabeza, cuanto más cielo mejor (no se ponga cerca de ningún árbol). Le vendrá bien una esterilla de acampada, en su defecto una toalla o una manta que le permitan tumbarse en el cielo mirando hacia arriba y le quiten algo de humedad del suelo.

    Deberá disponer ropa de abrigo acorde a la época del año, repelente de mosquitos en verano, y a ser posible buena compañía que le dé conversación para aguantar despierto más tiempo. Puede llevar mapas del cielo para ir apuntando las trayectorias.

    Para ver estrellas fugaces la mejor posición es como digo tumbarse hacia arriba, de modo que sus ojos vean la mayor parte del cielo posible.
    Las lluvias de estrellas fugaces no se ven por telescopio, pero si puede disponer de una cámara fotográfica, con la focal más baja posible (trabajar a 10mm es lo ideal), perfectamente enfocada, con un dew heater para el objetivo por si hace humedad (véase la siguiente entrada), podría ser un muy buen complemento. Es conveniente que apunte a la zona del radiante ya que puede obtener fotos como la que inicia la entrada. Ponga la cámara en una ISO alta, una f/ lo más baja posible y dele exposiciones de 15-20 segundos para que el cielo no se mueva demasiado (haga pruebas con la ISO, la exposición y f/ buscando fotos que tengan en cielo relativamente oscuro y donde las estrellas sean puntuales). Use un intervalómetro digital que le permita de manera cómoda fotografiar durante un par de horas y normalmente pillará más de una estrella fugaz. NO hace falta ningún tipo de montura, sólo un trípode. Si además apunta a la Estrella Polar, mediante el programa starstax (de nuevo le remito a esta entrada de fotografía sin telescopio), pille o no pille estrellas fugaces podrá generar un curioso efecto de las estrellas girando alrededor del polo norte.

    Por supuesto, lo fundamental es que la noche de observación no haya luna llena o luna muy crecida, (todo lo que sea luna mayor que cuartos ocultará las estrellas más débiles). Teniendo en cuenta que el periodo sinódico de rotación de la luna (el tiempo que tarda en repetir fase respecto la Tierra) es de 29 días, 12 horas y 44 minutos, en un año se producen 12 lunaciones completas y sobran unos 11-12 días, que es casi la mitad de una fase lunar. Por ello, si este año 2022 las Delta Acuáridas van a estar muy bien (luna nueva el 28 de julio, máximo el 30), el año que viene tendremos una fase lunar unos 11 días posterior, esto es, casi luna llena (luna iluminada al 88%), y por ello normalmente de un año para otro se alternan lluvias óptimas con lluvias desfavorables para la observación (al menos en lo que al máximo se refiere). Por cierto, como las dos lluvias más notables del verano, Delta Acuáridas (máximo el 29 de julio) y Perseidas (máximo 12 de agosto) se separan unos 15 días, mitad del ciclo lunar, cada verano veremos una bien y una mal, o las dos regular si la luna las pilla en cuartos.

4 - ¿Por qué se ven más estrellas fugaces al amanecer?

    Si lee sobre lluvias de estrellas fugaces, le dirán que estrellas fugaces las hay toda la noche, pero principalmente se verán al amanecer ¿por qué?  La explicación es muy fácil. Cuando en la playa se tira al mar de frente ¿qué parte siente más el contacto con el agua, la cara o la nuca? La cara ¿verdad? Sencillamente porque se la encuentra de frente.

    Con la Tierra pasa igual. Se encuentra en su movimiento de traslación moviéndose a mucha velocidad, y aunque es cierto que tiene masa para atraer partículas de polvo que ya ha dejado atrás, la misma masa tiene para atraer las que tiene delante y encima se va a chocar con ellas, que no van a poder evitar una Tierra que se les viene encima. Por ello es lógico que la Tierra va a recoger más partículas de polvo en la parte delantera de su movimiento que en la parte trasera ¿no? 



    En efecto, miremos la imagen anterior. La Tierra cruzando la nube de restos del cometa vista desde el espacio, sobre el polo norte, en su movimiento de traslación alrededor del sol (que en esta ocasión lo pongo más lejos para beneficio de los terrícolas) y con su movimiento de rotación, que nos establece dos zonas de anochecer y amanecer. Como se intuye, la mayoría de choques se producen de día, que no nos interesan y la zona que siendo de noche recibe de frente a la nube es la zona de la Tierra entre la noche cerrada y el amanecer (se indica con pequeñas flechas verdes).
    Al recibir esta zona de la Tierra la nube de frente, las partículas de polvo no tienen muchas opciones de escapatoria, se verán más estrellas fugaces que las que se ven entre el anochecer y la noche cerrada, que son estrellas que vienen de atrás, que pueden venir por la gravedad terrestre o no venir y esperar otro año a ver si siguen librándose de la quema.
       También hay que tener en cuenta que la Tierra tarde 365 días y 6 horas en dar una vuelta alrededor del sol. Supongamos que una nube de partículas está tan, tan concentrada, que su centro se sobrepasa en cuestión de horas, y este año durante un día, por ejemplo el de hoy, la Tierra se la encuentra a las 00:00h, el año siguiente será el mismo día pero a las 00:06h, el siguiente el mismo día pero a las 00:12h, el siguiente a las 00:18h, y el siguiente de nuevo el mismo día (por la corrección del año bisiesto) a las 00:00h y vuelta a empezar. Pero esto es algo a tener en cuenta, con las lluvias que poseen máximos muy concentrados depende también de en qué momento nos los encontramos. Quizás España se encuentra hoy ese máximo a las 6 de la tarde, en pleno día, y no disfrutamos de ese máximo de máximos, mientras en Japón son las 4 de la mañana y se hartan de ver meteoros, pero en un par de años cambiarán las tornas y nosotros seremos los que las disfrutemos ya que lo pillaremos a las 6 de la madrugada.

5 - El concepto de radiante

    Una pregunta que podría haberse hecho ya... ¿por qué una lluvia por ejemplo se llama las Perseidas y otra las Gemínidas? ¿Por qué una estrella fugaz se contabiliza como Perseida y no como Gemínida? Básicamente por dos motivos. 
1- Por las fechas. Las Gemínidas alcanzan su máximo el 13 de diciembre, mientras las Perseidas sobre el 11-12 de agosto. Es casi imposible ver una Gemínida en agosto y una Perseida en diciembre
2- Por el radiante. Relacionado con el apartado anterior de porqué se ven más estrellas al amanecer, las estrellas fugaces parecen partir siempre del mismo punto, que se corresponde con la dirección en la que miramos desde la Tierra a la trayectoria del cometa que dejó la nube de partículas. A este punto del que parecen salir se le llama radiante.
    Piense que está observando desde la Tierra al cielo nocturno una noche de agosto, y que en este preciso momento hay un cometa cuya órbita se acerca relativamente mucho a la de la Tierra, un cometa que en el momento del máximo acercamiento entre órbitas está en la constelación de Perseo. No importa que mire desde España o desde Namibia, ese cometa a mediados de agosto, momento de máximo acercamiento de las órbitas, está en Perseo soltando partículas de polvo. 
    El año siguiente el cometa ya no está en Perseo, se ha desplazado en su peregrinar, pero la Tierra a mediados de agosto se va a acercar a la posición que el cometa tuvo justo el año pasado, es más, a mediados de agosto, fecha del máximo acercamiento entre órbitas, la Tierra se encontrará con el máximo de partículas, y aún más, esas partículas se las va a encontrar la Tierra no en la dirección de Sagitario, al sur, sino en la posición de Perseo que es donde estuvo el cometa el año anterior.
    Y eso sucederá año tras año, el cometa si es periódico pasará siempre por el mismo sitio, regando de partículas los alrededores del sol, y la Tierra que también pasará por el mismo sitio en las mismas fechas porque nuestro calendario se basa en el periodo de traslación terrestre de un año, recogiendo esas partículas, se encontrará con el máximo en la misma fecha, y mirando al mismo sitio que es la dirección del máximo acercamiento.
    Por ello, todas las estrellas fugaces parecen salir del mismo punto, llamado radiante, huyendo de él. Si prolongamos hacia atrás sus trayectorias, todas ellas convergen en el radiante. Así, si una estrella fugaz posee una trayectoria compatible con el radiante de una Perseida, será una Perseida y no una Gemínida. En la imagen anterior hago una simulación de estrellas fugaces perseidas, y doy su punto de radiante. La imagen de fondo está generada por Stellarium.


    Las estrellas fugaces pueden ser más o menos brillantes, pueden tener una estela más o menos más larga, pueden salir más o menos alejadas del radiante, pero todas parecen salir del mismo sitio. En la imagen anterior hay una supuesta estrella fugar que no es una perseida ¿la ve?

    Le pongo otro ejemplo. Este mismo día 30 de julio mi amigo Pelukeitor y fuimos de madrugada a la laguna de Medina a intentar captar estrellas fugaces. En la imagen muestro una estrella que no es una perseida porque no tienen nada que ver con su radiante. Aunque no se ve la constelación de Acquarius, pero teniendo en cuenta que el cielo es curvo aunque la foto sea rectangular, posiblemente sea una delta acuárida.

    Por cierto, además de la notable contaminación lumínica presente en nuestros cielos, aunque en la foto la estrella fugaz se ve poco vistoso, en realidad fue un meteoro muy brillante. Téngase en cuenta que las estrellas dejan su imagen en estas fotos tras 30 segundos a f/4.5 e ISO 1600, y que en apenas un segundo el meteoro se ha registrado. Por eso esto de capturar estrellas fugaces en fotos no luce demasiado, la realidad supera a las fotos con creces.

      Se me ocurren más motivos para distinguir las estrellas fugaces; las partículas de polvo de una misma lluvia se mueven como nube a una misma velocidad en el Sistema Solar, y poseen una composición química similar; por ello, al caer en la atmósfera lo hacen a una misma velocidad (hay lluvias de estrellas fugaces más rápidas y lluvias más lentas), y al quemarse lo hacen dejando una estela de un mismo color. Sí, una estrella fugaz perseida puede ser muy distinta de una gemínida.

    Esto contesta la pregunta anterior de porqué distinguimos unas estrellas fugaces de otras. Para acabar voy a poner una imagen reveladora... aquella con la que comenzaba la entrada. Una supuesta perseida y la constelación de Perseo. En la mitad de la derecha pongo la silueta de la constelación así como el punto del supuesto radiante (mírese la foto anterior generada por Stellarium, el radiante efectivamente está ahí). Si prolongo la dirección de la estrella fugaz su trayectoria pasa por el radiante de las perseidas. No cabe duda de que es una de ellas. No hay más preguntas, señoría.


    De todos modos, hay que decir que los radiantes también se mueven a lo largo del cielo (unos más que otros) ya que los cometas también ocuparon diferentes posiciones en el cielo mientras iban soltando sus partículas de polvo, y la Tierra también se movía, por lo que a lo largo de varios días un punto  del sistema solar cercano y móvil va a adoptar diferentes posiciones respecto las estrellas del fondo (debido tanto al cometa como a la Tierra). Este movimiento del radiante no tiene por que ser pequeño, vamos a ver en un gif el movimiento del radiante de las leónidas desde que se activa la lluvia, 6 de noviembre, hasta que desaparece, 2 de diciembre. El día del  máximo, 17 de noviembre, hago una pausa mayor.


    Igual debería haber quitado el movimiento lunar, aunque ello da a entender que efectivamente con luna superior a cuartos se ven menos estrellas del fondo. De todos modos la misión de esta imagen es enseñar que el radiante tiene su movimiento propio.

6 - Cómo se designan las lluvias

    Teniendo en cuenta que en una lluvia de estrellas fugaces es muy importante el radiante asociado a las mismas, las lluvias se designan por el nombre de la constelación en la que está el radiante, y si hay más de una lluvia en esa constelación, o si hay una estrella brillante cerca del radiante, combinando el nombre griego de la estrella (las estrellas se van nombrando como alfa, beta, gamma, delta... de más a menos brillantes) junto con el genitivo de la constelación.
    Por ejemplo, las delta acuáridas reciben ese nombre porque su radiante está muy cerca de la estrella delta acuarii, a priori la cuarta estrella más brillante de la constelación de acuario, y se ha añadido el delta para separarlas de las eta acuáridas, que es otra lluvia.
    Sin embargo, las perséidas o las gemínidas se llaman así a secas, no se añade letra griega alguna, ya sea porque no hay una estrella con letra griega cerca del radiante, o porque en esa constelación sólo hay esa lluvia, y no hay dualidad posible.


7 - ¿Cómo se cuentan las estrellas fugaces? El concepto del THZ

    Vale, ya podemos clasificar las diferentes estrellas fugaces por el concepto de radiante, y con ello podemos localizar las diferentes lluvias que se producen en un año por el concepto de radiante. Ahora bien, unas lluvias son más importantes que otras porque en el momento del máximo poseen más estrellas fugaces que otras ¿cómo se cuentan las estrellas fugaces?
A este concepto se le llama THZ (Tasa Horaria Zenital), y básicamente consiste en contarlas, y determinar el máximo de estrellas que ha habido en una hora y cuánto ha sido dicho máximo.
Vaya por delante que esto es un concepto estadístico, y si por ejemplo las Gemínidas poseen una THZ de 100, significa que normalmente en el momento del máximo, a lo largo de una hora se pueden contar 100 estrellas fugaces, pero igual este año se cuentan sólo 50 o por contra 140. Haciendo observaciones de un año para otro estas cantidades se revisan y se actualizan.

    Otra cosa a tener en cuenta es que el contado no se hace como lo haría usted y yo, mirando al cielo, sino con cámaras muy sensibles que cubren todo el cielo, pillando estrellas que apenas se ven a simple vista. Después se haría un estudio de trayectorias para contabilizar justo las que son de dicha lluvia... Si estas cámaras captan unas 30 estrellas en una hora, nosotros seguramente pillaríamos esa noche y en ese mismo sitio menos de la mitad (entre otras cosas porque no podemos ver todo el cielo, cansancio...). Por ello, si una lluvia de estrellas fugaces tiene una THZ de 100, y suponiendo que esa noche, cerca del amanecer realmente se vean tantas estrellas, confórmese con ver unas 40-50.
   
 De todos modos, insisto en el valor dudoso de la THZ, una lluvia de estrellas fugaz puede poseer una THZ de 100, e igual este año verse sólo un máximo de 50 meteoros por hora, y el año que viene 150. La media de los dos últimos años sería precisamente 100, pero un año puntual no espere que se alcance justa la THZ, pueden ser más o menos los meteoros.
 
    Cuando dé la tabla de lluvias de meteoros, la columna que más dudas me ha dado es la THZ, porque según las distintas fuentes me he encontrado con valores muy dispersos. He optado poner la THZ que ofrece es Stellarium, excelente programa de ordenador, pero como digo, ello es señal de que alguna vez se han alcanzado esos valores máximos, no de que este año vaya a ser así.

8 - Las tormentas de estrellas fugaces; las leónidas

    Todo lo anterior es cierto, pero algunas lluvias de estrellas fugaces son especiales, como le pasa a las leónidas, que como el polvo repartido por su cometa, el Temple-Tuttle, no se distribuye de manera uniforme, cada 33 años alcanzan un máximo más especial (coincide con el periodo de dicho cometa). De hecho, yo pude ver la tormenta de 1999 y no estuvo nada mal, recuerdo llegar a ver 3 o 4 por minuto. No era lo que esperaba (suele pasar con estos eventos), pero no estuvo nada mal.
    Por no dar muchos datos copiados, remito directamente a este artículo de la wikipedia que habla de las tormentas de las leónidas. Por cierto, yo estuve observando la tormenta de 1999 y parece ser que me fui a la cama antes de tiempo, no llegué a ver esas 1000 por hora, pero unas 300 sí, en un minuto se veían 4 o 5, incluso recuerdo haber intervenido en directo en un programa nacional de radio poco antes de las 2 de la mañana contando con mi antiguo móvil lo que veía (¡qué lejos me parece ya todo ello!)

    Así se cuentan las estrellas fugaces. Todo lo que he narrado es de memoria... pero esencialmente cierto. Ahora viene una parte que no me sé de memoria, y quizás la más interesante, la que le permite ir al campo o a la playa y disfrutar... le doy un par de tablas muy interesantes.

9 - Las lluvias de estrellas fugaces más notables

    A continuación en la siguiente doy 36 de las lluvias de estrellas fugaces más notables. Todos los datos provienen del programa Stellarium. Están ordenadas por la fecha del máximo. De la localización del radiante en AR y DEC no le haga mucho caso, ya hemos visto que los radiantes se mueven.
    Una columna muy interesante es la de la velocidad, ya que si una lluvia de meteoros posee meteoros  lentos, son más fáciles de ver  que los rápidos.
    En cuanto la THZ, ya le digo, es un valor muy indicativo de lo potente que puede ser una lluvia, y una lluvia con THZ 5 debe ser más débil que una con THZ 5-20, pero no deja de ser un valor estadístico que puede cambiar para mejor o para peor (normalmente estos cambios siempre son a peor 😔)


Le dejo acceso al PDF por si quiere descargarlo (descargar aquí)


10 - Todas las lluvias de estrellas fugaces

    A continuación, doy en una tabla todas las lluvias de estrellas fugaces existentes, incluyendo las anteriores (por constrastar y publicar).


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