(Hace unos 20 años conseguí que me publicaran un artículo en una revista nacional de astronomía. En efecto, durante los meses de septiembre y octubre de 1997, la revista Tribuna de Astronomía, del grupo Sirius, publicó un artículo que describe cómo cualquier noche del año es posible saber la hora mirando el cielo nocturno y haciendo unos sencillos cálculos mentales. 20 años después, al revisarlo, yo cambiaría algunas expresiones y haría otros gráficos, pero he preferido mostrarlo tal como lo publicaron, incluyendo los gráficos 'vintage'.)
Cómo Saber la Hora mirando las estrellas
Revista nacional "Tribuna de Astronomía"
Septiembre y Octubre de 1997
Fue la belleza del cielo nocturno lo que siempre me llamó más
la atención, si bien tras muchos años de observaciones
mi forma de considerar la gran bóveda celeste ha
cambiado. Al principio de todo, cuando no conocía
figuras o nombres, ni tan siquiera a Orión, era fascinante perderse (y nunca
mejor dicho) en ese cielo en desorden
salpicado de multitud de puntos azules, blancos,
amarillos, anaranjados y rojizos. Una vez que pasó el
tiempo mirar al cielo resultó mas sencillo y dramático;
por donde quiera que lo hacía no dejaban de aparecer
figuras y personajes mitológicos, nombres de héroes y
recuerdos de sus gestas lejanas. El cielo, para mí, perdió
entonces el encanto de lo desconocido, de lo profano,
para no dejar de ser un campo de continuos descubrimientos
sobre las reglas que regían ya no el desorden
sino la armonía. Ahora, a veces pienso que tristemente,
es todo mucho más racional, y la experiencia,
unida al conocimiento, me ha dejado una serie de
trucos que extraer a la noche. Uno de ellos es mirar a las
estrellas y con un margen de error no mayor a diez,
quince minutos (a veces incluso el exacto), saber la
hora que es sin mirar el reloj, lo que por cierto no es nada
complicado, tan sólo hay que saber dónde está la
constelación de la OSA MENOR y seguir ciertas reglas muy
sencillas. Por supuesto, que nadie espere conocerla
con la precisión que alcanza un reloj; según afinemos nos
moveremos en un principio en errores que oscilarán
entre 0 y 30 min., que con la experiencia iremos
afinando hasta esos diez minutos. El método a seguir lo
componen varias ideas muy sencillas que voy a repetir
una y otra vez (para que todo quede claro). Dicho esto,
abordemos el problema.